El trabajador, acusado de un presunto delito contra la salud pública, ha sido puesto en libertad – El establecimiento situado en la Avenida Mancomunidad está abierto

La Policía Nacional de Arrecife ha detenido al cocinero del establecimiento que sirvió una paella con cannabis por un presunto delito contra la salud pública después de que existieran indicios suficientes de que podía haber sido el responsable de haber introducido esta droga durante la elaboración del almuerzo a los asistentes de un curso organizado por una autoescuela de la capital conejera. Según fuentes de la investigación, aunque el cocinero se encuentra ya en libertad tras prestar declaración ante la Policía asistido por un abogado, está acusado de un presunto delito contra la salud pública.

Los hechos se remontan al pasado sábado día 11 de enero, cuando un grupo de alumnos de la autoescuela Zakaria de Arrecife, que realizaba un curso intensivo de teórica y práctica para obtener el carné de carretilla elevadora y camión pluma, terminaba en el servicio de urgencias después de haber almorzado una paella en un establecimiento de la Avenida Mancomunidad de Arrecife.

Las náuseas y mareos de los comensales obligaron al traslado de ocho personas en ambulancia al hospital Doctor José Molina Orosa de Arrecife. Varios, entre ellos el director de la autoescuela, tuvieron que permanecer en el hospital hasta el domingo. El parte médico confirmaba la ingestión de cannabis descartando que la intoxicación hubiese sido por un posible mal estado del marisco utilizado.

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“Me comí tres platos porque estaba buenísima pero cuando salí del local me desvanecí y caí desplomado al suelo”, reconocía el director de la autoescuela pocos días después de salir del hospital de Arrecife al mismo tiempo que aseguraba que era un cliente habitual del local.

De la decena de afectados, uno rehusó ser atendido en el centro y otro se fue voluntariamente, según han señalado fuentes del hospital, que han indicado que seis fueron dados de alta el mismo día 11 y dos tuvieron que permanecer una noche en observación en el servicio de urgencias.

La investigación de la policía apuntaba en un primer momento tanto al cocinero como a los camareros que trabajaban ese día, aunque las pesquisas han culminado con la única implicación del responsable de cocinar la paella.

En sus primeras declaraciones, el cocinero negó cualquier relación con la utilización del cannabis a la hora de elaborar la paella e incluso dijo que, tras terminarla, se ausentó del establecimiento, por lo que la comida quedó fuera de su control.

Los afectados por la intoxicación de cannabis aseguraron desde un primer momento que cuando llegaron al local la paella ya estaba en la mesa y tapada con papel de aluminio por lo que se descartó que alguno de los asistentes al curso pudiera haber introducido la droga antes de empezar la comida.

Fuentes sanitarias han señalado a Efe que la paellera fue precintada por la Policía Local de Arrecife el mismo día en que ocurrieron los hechos por tratarse de un problema de salud pública, si bien cuando fueron los especialistas a tomar muestras había sido desprecintada y lavada.

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Los técnicos de Salud Pública del Gobierno de Canarias acudieron en la mañana del lunes 13 al local para analizar la cocina, el arcón con la comida y los botes de las especies por si algunos pudieran tener restos de esta droga. Aunque la cocina ha sido precintada el establecimiento está abierto al público. El atestado ha sido remitido a los juzgados de Arrecife donde continúa la instrucción del caso por un presunto delito contra la salud pública.

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.