Dejan sus huellas en la calida arena, hacen figuras a la orilla del mar, hacen caricias, dan calor todas esas cosas y seguramente muchas más hacen esa porción que no por alejada tan primordial del cuerpo humano como son los pies.

Por la Dra. Andrea C. Mindlin – Universidad de Buenos Aires.

Lo cierto es que los pies, esa parte a veces tan poco cuidada son un objeto de culto.

Los pies empezaron a ser objeto de culto en China, bajo el reinado de Li Yu, que tenía más de poeta que de emperador y adoraba los pies. Fue su esposa, Yao-niang, la que comenzó a vendárselos para reducirlos. A partir de ella y hasta 1912, fecha en que se prohibió esta práctica, las chinas de alta alcurnia y las prostitutas se vendaron los pies desde niñas con objeto de lograr unos apéndices diminutos que, para sus coetáneos, resultaban afrodisíacos.

Podían, así, permitir que un hombre tocara accidentalmente los senos o el sexo de una mujer, pero jamás sus pies. Por lo general, ni al marido le estaba permitido verlos desnudos. Para calzarse, las señoras se encerraban en sus aposentos. Ni siquiera era fácil verles el calzado, porque se lo cubrían con unas polainas atadas desde la pantorrilla. Los famosos “manuales de alcoba”, que incluían cientos de explícitas posturas sexuales, no representan nunca los pies desnudos.

A pesar de todos los significados que se le da a los pies, relacionados con el placer es sorprendente la poca atención y cuidado que se le propician; a sabiendas que la fatiga de los mismos afecte adversamente el bienestar fisco y mental y dé lugar a un descenso acusado del rendimiento del organismo.

Esto no debería sorprendernos si pensamos que los pies soportan todo el peso de cuerpo.

Los pies son como una gran terminal eléctrica pues esta llena de terminaciones nerviosas de ahí que dé tanto confort masajearlos, sino que, además de las palmas de las manos, es la parte del cuerpo que más glándulas sudoríparas tiene, especie de tubitos enrollados cerrados en un extremo y por el otro extremo tienen una salida por los poros de la dermis, las cuales contienen grasa sobrante líquida con sabor salado, que vendría a ser el tan desagradable sudor y, aún así, la cultura nos exige que encajemos los sufridos pies en medias y en zapatos.

Esta grasa sobrante liquida, sudor, que se acumulan en los zapatos, medias, botas o cualquier otro tipo de prisión que se le imponen, proporcionan las condiciones de humedad y calor, para el crecimiento de cualquier tipo de microorganismos, los cuales le propician al pie un medioambiente poco saludable; a pesar que los calcetines o medias se cambian con frecuencia y los pies sean lavados a menudo, los microorganismos quedan en los zapatos y los calcetines limpios se vuelven a infectar, esta situación se puede agravar por la escasa ventilación ocasionada, por ejemplo por suelas y partes superiores de zapatos de gomas impermeables y resinas sintéticas o por el nailon de las medias.

masaje 8Todos estos inconvenientes aquí nombrados tienen también una estacionalidad porque a pesar que en verano hace más calor, el pie transpira más, y la producción de sudor es mayor, en verano el calzado que se usa suele ser más fresco y el pie esta menos encerrado.

Es por este encierro generalmente excesivo, prioritariamente invernal, y a más bajas temperaturas la situación se agrava ya que para protegerse del frío se utilizan más abrigos en los pies, no siempre los adecuados, el calzado suele ser de un material más impermeable por las lluvias o la nieve por lo que aparecen afecciones debidas a una pobre circulación e inadecuado suministro de sangre a pies y manos que son los llamados sabañones que se manifiestan como un enrojecimiento e irritación localizada llegando a producir dolor.

Esta claro que el calzado que se utilice va a tener un efecto preponderante en la salud de nuestras extremidades de los miembros inferiores que al menos físicamente nos mantienen erguidos como corresponde a un verdadero Homo Sapiens.

Es evidente que en primer lugar, pero no el único, el material con que este hecho el calzado es fundamental, el tradicional y poco ecológico calzado de cuero es extremadamente efectivo en la absorción y transmisión del sudor, por lo cual va a tener una considerable influencia sobre la salud del pie, por otro lado los materiales sintéticos al ser impermeables no favorecen la transmisión del sudor.

A pesar que aparentemente en el campo del calzado el cuero lleva las de ganar, los calzados hechos con fibras como las de cáñamo, yute o lona también permiten una correcta aireación del pie, así como una correcta apoyatura del peso corporal.

Obviamente hay que resaltar, que es insustituible el hecho que un zapato sea cómodo para que el pie esté anatómicamente sano.

Como vestimos al pie es una forma de cuidado de afuera hacia adentro, ahora hay que mimar esa ultima porción de nuestro cuerpo, a veces bastante olvidada.

Para empezar después de darnos un baño es imprescindible secar como una fina pieza de porcelana los pies, tomando el tiempo que esta tarea requiere, ya que si no lo hacemos lo primero que vamos a sufrir es una infección micótica, el tan molesto e inoportuno pie de atleta, pero atención: esto no basta, es conveniente además espolvoréalos con talcos para pies, preferentemente sin perfume.

Hay diversos preparados para proporcionar alivio a los pies cansados o doloridos, otros para suavizar la piel endurecida o combatir la sudoración del pie, irritaciones y erupciones de la piel. Además existen preparados medicinales que contienen drogas para combatir el pie de atleta, erupciones cutáneas que con la debida atención podemos evitar llegar a esta situación extrema.

Otra actividad necesaria y placentera para proteger nuestros maltratados andadores son los baños con agua caliente que van a estimular la circulación sanguínea, eliminan las secreciones sudorales rancias y reduce el riesgo de infecciones bacterianas.

A estos benéficos baños de agua caliente se le puede agregar sales, que van a ablandar la piel endurecida además de la sensación de alivio que generan.

A los baños de sales se le pueden agregar aceites esenciales que, como en el caso del mentol, van a proporcionar una agradable sensación de frescura, o como el aceite de cannabis que va a ayudar al cuidado de la piel dejándola más suave y tersa.

Otra opción muy gratificante, sólo para quien esté a orillas del mar, son los baños de mar ya que las sales marinas y la acción que ejerce la arena en los pies a modo de un pulido natural produce un efecto natural desinfectante, desinflamarte y descamador de las células endurecidas de la piel que evita la formación de los tan antiestéticos y dolorosos callos.

Para quienes no tienen la suerte de tener un mar cerca se pueden emplear sales marinas comerciales para hacerse baños de pies y luego frotar cariñosa e intensamente con un aceite de cannabis.

Específicamente para los callos, que es una afección muy común en la piel de los pies, que consiste en el crecimiento de piel dura sobre zonas donde se repite una presión o una fricción, si bien hay manera para combatirlos hay que eliminar las causas que los originan que pueden ir desde un calzado que aprieta o produce una fricción repetitiva en un lugar determinado hasta el uso excesivo de tacones, en donde sólo hay una porción del pie que está recibiendo todo el peso del cuerpo.

Los preparados que se suelen utilizar para los callos generalmente tienen ácidos que tienen la acción de descamar esa piel dura, que por otra parte esa porción de piel está compuesta por células muertas, de ahí su dureza.

Estos ácidos como el láctico o el acido salicílico son bastante fuertes y pueden producir irritación si se los utiliza en piel sana, por ello estos preparados hay que colocarlos con mucho cuidado.

Un preparado bastante sencillo de preparar es el siguiente:

Colodión flexible o elástico 10%

Aceite de Cannabis 10%

Acido Salicílico 80%

Se disuelve el acido salicílico en el colodión elástico, preferentemente usar un recipiente de peltre para este paso y luego se le agrega el aceite de Cannabis.

Aplicar este preparado una vez al día en el lugar afectado pero, antes de aplicarlo, tomamos vaselina y untamos alrededor de la parte afectada, con el fin de proteger a la piel sana de una irritación.

La acción del aceite de Cannabis es muy importante, el colodión es una es una solución de piroxilina (una nitrocelulosa) en alcohol y éter que forma una película flexible, liberándose los principios activos lentamente, con lo que se consigue una acción retardada y mantenida, razón por lo cual se utiliza para los callos de forma tal que el acido salicílico vaya ejerciendo su acción descamadora durante un determinado lapso de tiempo, este acido si bien ejerce la acción como de “quemar las células muertas y axial, pulir la dureza, también es necesario ayudar a regenerar piel sana, para ello no hay mejor acción que la del aceite de cannabis, que al tener una viscosidad similar al de la del colodión va a ejercer una acción también prolongada en el tiempo, aportando sus propiedades emolientes y nutritivas de las que hemos venido hablando, gracias a la gran cantidad y proporción de ácidos grasos esenciales que contienen que intervienen en la regeneración de las células de la piel, en este caso del pie, que debe recibir cuidados más drásticos.

Esta ultima porción del cuerpo no sólo requiere de cuidados para estar sanos sino también de una cosmética para que luzcan bellos, dado que para algunos nada más erótico que unos lindos pies.

La cosmética que podemos realizar sobre los pies, además de un buen podólogo, quien se ocupará de cortar uñas y cutículas, es ponerle diversas cremas.

Como hemos venido diciendo en otros números de Cannabis Magazine la piel es el órgano más extenso del cuerpo humano y según las partes del cuerpo que cubran serán los cuidados especiales que necesite.

La piel de los pies es fina y delicada que está sometida a grandes presiones, fricciones e inclemencias del tiempo, para que mantenga su lozanía hay que usar cremas así como lo hacemos para el rostro, claro que éstas van a tener unas variantes.

Las cremas que utilizaremos para embellecer y cuidar nuestros pies deben ser muy emolientes, es decir, que produzca una película oclusiva o semioclusiva sobre la piel que impida la evaporación del agua y, por tanto, que aumenta la hidratación de la epidermis.

Por lógica las cremas no deben ser extremadamente grasas porque estarías en la situación de que es peor el remedio que la enfermedad, ya que si fuera muy grasa beneficiaria la proliferación de bacterias.

A una crema base no grasa se le puede adicionar alcanfor o mentol para dar la sensación de frescura y desde luego añadirle el aceite de cannabis en un 10 porciento, que aunque es un aceite, tiene un gran poder curativo y regenerativo.

Después que sanemos, embellezcamos y protejamos nuestras extremidades fetiches, también es muy placentero y, porque no saludable, mimarlos con un buen masaje, hay técnicas especificas para masajes, incluso practicas orientales en donde se relacionan los distintos órganos con partes determinadas de las plantas de los pies, la denominada y tan de moda reflexología consiste precisamente en la teoría que existen ciertas zonas en el pie que representan todos los órganos del cuerpo y al estimular esas zonas manualmente podemos calmar el dolor, facilitar la eliminación de toxinas, prevenir ciertas enfermedades, disturbios de la salud además de ser de por sí una práctica absolutamente relajante que ayuda a combatir el estrés.

Sin ponerle un nombre a esta práctica de masajear los pies y con el objetivo de mínima de conseguir una buena relajación es que aquí damos una sencilla practica de masaje podal.

Para poder sacarnos esa expresión del rostro de enojo, dejar de tener el ceño fruncido y lucir más vitales, aconsejo seguir estos sencillos consejos.

Porque no hacer un día de spa, palabra tan fashion en estos días , pero sólo de pies.

Después de hacernos un buen baño con sales marinas agregándole al agua unas gotas de aceite de Cannabis, de lavanda y mentol, secar de forma muy cuidadosa los pies, luego frotarlos con una crema que es recomendable que contenga aceite de cannabis, por lo ya antedicho.

Luego en un lugar con luz tenue, unas velas aromáticas y música a gusto seguir esta receta de masajes:

  • Sostenemos el pie derecho con la mano izquierda, el pulgar lo colocamos sobre la cabeza de los metatarsianos (los huesitos más largo de los dedos de los pies) y los cuatro dedos sobre el empeine. Con la mano derecha masajeamos los dedos en forma ascendente, acentuando el masaje en la punta de los dedos.
  • Con las dos manos trabajar los costados del pie en forma ascendente.
  • Cogemos el tendón de Aquiles (el talón) con los dedos pulgar e índice, y lo masajeamos en forma ascendente sobre el tendón, sosteniendo la pierna.
  • Trabajamos el empeine con toda la mano abierta en forma ascendente.
  • Realizamos movimientos de flexión de la pierna sobre el muslo. Utilizamos la mano izquierda sujetando firmemente la rodilla. Doblamos suavemente la pierna sobre el muslo, llegando al límite sin producir dolor. Extender la pierna sin separar la mano izquierda de la rodilla, mientras con la derecha tiramos suavemente el talón hasta alcanzar que la extensión sea total.

Una vez realicemos toda esta progresión de movimientos con el pie derecho, pasamos al izquierdo y lo trabajamos de la misma forma.

Si ya sé, tal vez resulte complicado, pero sólo al principio, una vez que se aprenden los movimientos es muy fácil y placentero.

Luego prenderse un buen canuto y la vida se verá maravillosa.

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.