El cáñamo como alimento de consumo humano se remonta mucho en el tiempo. En el más antiguo tratado agrícola chino, el Xiao Xia Zheng, ya se tiene constancia de su consumo como alimento. En torno a los años 4.000 -5.000 antes de Cristo se puede ubicar el uso del cáñamo junto a otros cultivos como mijo, trigo, frijol y arroz en diferentes partes de China. La siembra, cultivo y procesamiento se desarrollaron muy rápidamente y se convirtió en una especie de manejo bastante avanzado, obteniéndose todo tipo de productos incluida la pólvora.

Por David Hurtado

Puesto que la mayoría de éstas y otras especies de uso humano fueron domesticadas, es fácil imaginarlas muchísimo más atrás en el tiempo pero como aprovechamiento de recogida silvestre y nómada. El cáñamo se extiende y crea grandes áreas de cultivo silvestre, por lo que las poblaciones migratorias se aprovechaban de este recurso estacional en las vastas superficies de las llanuras de Asia. Pues bien, desde la antiquísima China hasta nuestros días el cáñamo ha sido utilizado en todas las culturas pero algunas no lo incorporaron como alimento, en un principio.

Vamos a explicar un poco por que el cáñamo es un alimento tan valioso como para captar la atención desde miles de años atrás de la Medicina Tradicional China, que es un referente en nutrición para el resto del mundo.

El cáñamo es un alimento proteico completo, puesto que se define como tal a aquellas proteínas que proveen los 8 aminoácidos esenciales: Leucína, lisina, metionina, fenilalanina, treonina, valina, triptófano, histidina, tirosina, isoleucina y selenocisteína.

Estos aminoácidos junto con otros se encadenan tal y como el ADN va ordenando. Una dieta sin uno de ellos a la larga provoca enfermedad y la muerte.

El cáñamo no es la única semilla que los contiene todos en el embrión, el lino también, pero en lo que es único el cañamón es en que el 65 % de él está compuesto de Edestín Globulina, y es la semilla con mayor contenido proteico de esta clase en todo el reino vegetal. Sin embargo a pesar de ser más energética, digerible y adecuada para el cuerpo que la carne, ésta proteína animal sigue siendo quien domina los recursos en la tierra, agotando suelos, agua y creando gran contaminación.

Como alternativa a la carne, el cáñamo es la mejor opción, pero mientras el mercado y el consumidor no estén preparados para el cambio, la inercia del sistema actual basado en proteína animal seguirá siendo enorme y moviendo económicamente otros sectores. Por eso requeriría de una profunda renovación y autocrítica, que tal vez sólo sea posible bajo una situación de crisis realmente definitoria, es decir un contexto en que nuestras decisiones fuesen vitales y transcendentales.

La globulina es una proteína simple que se encuentra en las semillas y en la sangre animal, pero la Edistina es la globulina de las plantas. Pues bien las globulinas junto a albumina se clasifican como proteínas globulares, las cuales son esenciales para crear las enzimas, anticuerpos, hormonas, la hemoglobina y fibrogin (necesario para la coagulación). Todas estas proteínas son la “ Esencia de la Vida ” puesto que son sobre quienes recaen las funciones imprescindibles del organismo.

La albumina, la globulina y el fibrogin son los tres tipos de proteínas plasmáticas más importantes.

Quiere esto decir que estas tres proteínas representan el 80% de la parte sólida del plasma sanguíneo y sirven ni más ni menos que como reserva rápida de aminoácidos para cualquier tejido corporal que lo necesite de forma inmediata a través de la sangre. El cáñamo es un alimento ideal para ser consumido a todas horas, porque siendo tan digerible puede transportar esa reserva rápidamente a los tejidos mientras éstos los necesiten todo el tiempo que dure el esfuerzo.

Estas propiedades de asimilación tan asombrosas demuestran que perfectamente puede plantearse el cáñamo como una herramienta para combatir el hambre y la desnutrición crónica en niños y ancianos que ya están en fase aguda de desnutrición, casi irrecuperables para muchos expertos.

La albumina en la semilla, actúa como el “combustible” que emplea el embrión hasta que puede disponer de la energía fotosintética, y está ubicada entre el embrión y la cáscara, y por otro lado, la edestín globulina dentro del embrión garantiza que la nueva vida disponga de las enzimas necesarias para su actividad metabólica.

Pues bien, la globulina es la tercera proteína en abundancia del organismo y realiza muchas funciones enzimáticas dentro del plasma, pero lo más importante es que es responsable tanto de la inmunología natural como de la adquirida, con la que el cuerpo hace frente a los agentes patógenos invasores. En este sentido el cáñamo consumido regularmente, sería un alimento preventivo de enfermedades infecciosas porque mantiene un adecuado suministro de globulinas que el cuerpo puede incorpora rápidamente al plasma.

El cuerpo usa proteínas de globulina para fabricar anticuerpos con que atacar a los agentes infecciosos o antígenos.

Tanto ella como la gamma-globulina son esenciales para un sistema inmunológico saludable y fuerte, y esto es muy importante, que pueda neutralizar tanto a los patógenos como a las toxinas.

Las globulinas alfa, beta y gamma transportan los materiales que necesitan las estructuras del cuerpo dañadas o desgastadas para regenerarse. Y las inmuno-globulinas son la primera línea de defensa del cuerpo contra la enfermedad y la infección, cuyos agentes negativos, deben atravesar el sistema linfático antes de llegar al torrente sanguíneo y por eso las defensas deben ser sanas y fuertes para contenerlos antes de que sea tarde.

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Al incorporar en nuestra alimentación las proteínas durante la digestión se descomponen en aminoácidos, los cuales son llevados y usados para crear nuevas proteínas específicas donde las necesidades del cuerpo humano lo requieran.

El cuerpo humano necesita aminoácidos en cantidad suficiente para crear globulinas, y han de estar siempre disponibles, porque pueden ser suficientes para prevenir enfermedades por deficiencia de ellos, pero puede que no haya suficientes para crear las inmuno-globulinas con las que rechazar una infección repentina. El cuerpo debe tener suficiente material de aminoácidos, y lo mejor es comer alimentos ricos en proteínas de globulina para que el cuerpo pueda crearlas a su vez.

Un 65% de Edestin Globulina y algo de albúmina en el cañamón nos lo pone fácil y muy disponible de un modo parecido al del plasma sanguíneo.

Un cuerpo alimentado de este modo mantiene un nivel de prevención sobre infecciones bastante alto.

El cáñamo provee al cuerpo todos los aminoácidos esenciales necesarios así como los tipos y cantidades adecuadas para crear albúmina sérica ( del suero humano) y sero-globulinas como la gamma-globulinas de gran valor inmune. La importancia de esta última es tal, que se buscan individuos muy sanos para aislarla de su sangre y proveerla por ejemplo a niños que padecen cáncer y cuyas defensas han quedado muy débiles por efecto de la radioterapia y quimioterapia. Incluso estas gamma-globulinas aportan inmunidad temporal al paciente si provienen de personas que han superado enfermedades como hepatitis o varicela.

Personas que sufren enfermedades de inmunodeficiencia, podrían mejorar e incluso sanar, y esta conclusión se sustenta en que la deficiencia nutricional causada por tuberculosis se mitiga eficientemente tratando con semillas de cáñamo al paciente. Ésta es una severa enfermedad que por bloqueo nutricional llega a producir que el cuerpo se consuma a si mismo.

Germinado de semillas

La habilidad del cuerpo para resistir y recuperarse de una enfermedad depende de cuán rápido puede generar masivas cantidades de anticuerpos con que defenderse en el primer ataque del antígeno. Si la materia prima con la que creamos la proteína de globulina es insuficiente, el ejército de anticuerpos tal vez sea muy bajo como para prevenir y evitar que comiencen los primeros síntomas de enfermedad.

Es decir, si ante los primeros síntomas, simplemente nos nutrimos con un aporte extra de cañamones o bien de aceite, atajamos el avance de la enfermedad de forma radical, si no ha llegado a extenderse más allá del sistema linfático.

De todas las semillas de plantas que existen, la semilla del cáñamo es las más importante proveedora de materia prima con que sintetizar globulina, la de mayor contenido en el reino vegetal. Comiendo regularmente cañamones, aseguraremos que el sistema inmunológico posea una reserva de suministros de inmuno-globulina necesarios para garantizar que los anticuerpos destruyen la enfermedad y mantener un nivel adecuado de prevención contra enfermedades producidas por patógenos..

Más adelante, seguiremos con la química nutricional del cáñamo pasando de los aminoácidos, tratados en este, a los Ácidos Grasos Esenciales o EFAs en el siguiente capítulo, que son vitales e imprescindibles para la salud humana si deseamos que ésta sea óptima.

A todas las ventajas que posee la planta desde el punto de vista bioquímico en su composición hay que añadirle el hecho de que puede ser cultivada sin necesidad de productos fertilizantes ni insecticidas que podrían contaminar una fuente tan pura de recursos alimenticios.

La planta del cannabis sativa posee una raíz pivotante profunda que extrae nutrientes del suelo y por tanto aunque agradece muy bien el nutriente, sobre todo el orgánico, no es obligado o imprescindible el abono químico de síntesis.

Por otro lado, libera unas sustancias llamadas terpenos que aunque no es un veneno actúan como repelente para muchos insectos por lo que la planta pierde atractivo. El cáñamo también sufre plagas de hongos, insectos y animales que comen sus hojas, pero su asombrosa capacidad de rebrote siempre permite una pronta recuperación, ya bien de sus hojas o bien del tallo.

Es por tanto es un cultivo óptimo para agricultura orgánica libre de contaminantes, siempre que el suelo y el agua también lo sean, por lo que se debería haber apostado más por él.

Sin embargo su conocido uso para pienso de aves y el olvido de todo lo que fue tradicional en la vida rural en general, no le dan su merecida posición en la sociedad actual, aunque la humanidad le debe mucho agradecimiento.

Muchos países como Canadá si le han dado un gran valor al cultivo para uso alimentario, y es que allí hay un alto nivel de conciencia, como demuestran su millón doscientos mil habitantes semi-vegetarianos.

Existe una amplia gama de productos y multitud de compañías que ofertan alimentos de cáñamo tanto en Canadá, como en Estados Unidos y Europa.

Puesto que la cáscara es muy fuerte por ser un tejido altamente lignificado, la proteína de cáñamo se consume pelada o también se puede decir decorticada.

Esta cubierta o aquenio, es a la escala de la semilla del cáñamo como el de la nuez. Incluso es llamado “ Hemp Nut” en los países anglosajones porque su sabor recuerda en cierto aspecto al de las nueces. Además, ese vocablo permite al consumidor diferenciar ese producto de un cereal, ubicándolo más correctamente en su diferencia botánica ya que el cáñamo no se parece en nada a los granos de trigo, cebada o el de cualquier otro grano al que estamos acostumbrados.

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No es de la familia de las gramíneas sino de las cannabáceas, por eso no contiene gluten.

Como decíamos, la semilla pelada es algo que antes no se conocía por la dificultad técnica que implicaba cualquier transformación compleja.

Tradicionalmente en África al interrumpir la lactancia materna durante el destete se daban a los bebés “ Porridge” o gachas de cañamones para así seguir incorporando en el niño el gammalinolénico que también contiene la leche de la mujer.

La palabra “Gacha”, es una traducción muy precisa y descriptiva del modo en que se consumía, porque es harina disuelta en agua o en leche. En el sur de España es un plato muy tradicional ligado a tiempos difíciles, de escasez. La gacha manchega de almortas (titos o chícharos), de garbanzo, la gacha andaluza de trigo. En Cataluña había unas gachas muy nutritivas que se hacían para las cuadrillas de obreros con cáñamo y garbanzos. Todas éstas se hacen con agua y también se llaman polenta o “grits”.

Pero cuando se disuelve la harina en leche se llama con más propiedad gacha y las más comunes en todo el mundo son las de avena y sémola.

Pues bien, como en África se usaban las semillas enteras, un método para disolver la blanda proteína del cáñamo era cociéndola lentamente en leche. Una vez toda disuelta, se pasaba la papilla por un colador para apartar la dura cascarilla. Así los bebés recibían el mejor y más perfecto aporte para su pequeño cuerpo.

Actualmente muchas compañías dedicadas a la alimentación de cáñamo ofrecen harina como un formato sencillo de preparar, pero hay otros modos de consumirlo.

Las semillas de cáñamo molidas son una pasta grasa debido al su alto contenido en aceite, por lo que es necesario eliminarlo, por tanto el subproducto del prensado de semillas de cáñamo para aceite, es lo que llamamos torta. Es perfecta para añadir al pan y los platos en su cocción.

La harina de cáñamo no levanta, no tiene gluten y no se comporta como una normal utilizada para hacer el pan. Por entero en una masa no es posible utilizarla sino que hay que mezclarla con otras harinas a no ser que quieras hacer una torta o galleta plana. En una mezcla de 3:1 cáñamo/trigo produce un pan rico pero fuerte y pesado en 7:1 logramos una hogaza de pan normal con toques de cáñamo y un ligero sabor acompañando.

También se fabrica pasta de cáñamo, galletas, chocolatinas, cereales enriquecidos, yogures, mantequilla, queso blanco vegetal y tofu, así como leches, batidos y helados.

En verdad es que el cáñamo es asombrosamente manejable y más versátil que la soja con mucha diferencia por no hablar de su contenido libre de alergénicos y sin transgénicos.

El cáñamo es una planta llena de beneficios, pero también compleja en su manipulación y muy burocrática. Quiere esto decir por un lado que desde un punto de vista de sus cuidados higiénico sanitarios es muy exigente puesto que el riesgo de que se estropee existe, no es bajo, y si es peligroso un enranciamiento o contaminación, si no se siguen unas normas básicas de eludir exposiciones al sol y a la temperatura.

Por otro lado la Administración, tanto española como europea e incluso en países tan avanzados como Canadá, pecan de ignorantes a la hora de tratar a los granjeros, transformadores y envasadores. Pero sobre todo las instituciones españolas muestran una sensibilidad que deja mucho que desear, mostrando unas lagunas de desconocimientos que no evidencian ninguna rigurosidad ya que parecen obviar del todo los criterios científicos y técnicos.

Muchos esforzados agricultores son acusados de cultivar marihuana y siempre se les trata como si la duda estuviera justificada en torno a si lo que hacen es licito o no, y esto ocurre porque como es una planta de infinita bondad y recursos múltiples, roza la incredulidad en gentes ignorantes sobre dichas capacidades.

En el siguiente capítulo seguiremos profundizando en éste área de la nutrición. Hay muchas personas luchando en este sector del cáñamo tradicional en muchas partes del mundo que requieren del apoyo de los consumidores para poder mantenerse en esa lucha, por eso muchos productos incluyen “ Gracias por sostenernos”

Si ya no tenéis dudas de lo necesario y vital que resulta esta vieja-nueva planta para estar lo más sanos y felices que podamos no tardéis ni dudéis en poneros en contacto para ayudaros a incorporarlo en vuestra dieta diaria.

Deseando lo mejor para tod@s y para la tierra que tanto nos necesita me despido con la esperanza de haber sido útil y que se logre comprender mejor la urgencia de luchar para lograr entre todos un mundo mejor alimentado y más justo en el que a nadie, sobre todo a los más débiles e indefensos, les falte esta maravillosa proteína en su vida.

David Hurtado
www.canamosolidario.org
[email protected]

Acerca del autor

Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.