Médicos aseguran que los tiempos “están siendo lentos”

Luego de pasado un año desde que un decreto habilitó la plantación, el cultivo, la cosecha y la comercialización de cannabis para ser destinado de forma exclusiva a la investigación científica y la elaboración de especialidades farmacéuticas para uso medicinal, aparecieron 34 proyectos para producirla.

“Hay 34 proyectos presentados en el IRCCA (Instituto de Regulación y Control de Cannabis) para cannabis medicinal y cáñamo industrial”, informó a El Observador el exsecretario de la Junta Nacional de Drogas, Milton Romani. Uno de ellos es una empresa israelí “muy fuerte” que quiere producir en el territorio uruguayo para exportar, que tiene permiso para vender en el mercado estadounidense y el europeo.

“Quiere venir a instalarse acá porque la ley le facilita un montón de cosas”, indicó Romani. Desde un inicio, estaban habilitadas para presentarse tanto empresas nacionales como internacionales. Romani aseguró que el IRCCA está a la espera del Ministerio de Salud Pública para definir qué proyectos se aprobarán.

Desde abril los médicos se están formando para conocer más acerca de qué dosis de cannabis medicinal y a quiénes es preferible suministrarlo. Este sábado termina el curso de medicina cannábica, dedicado a especialistas que quieran formarse en la utilización de la marihuana con fines exclusivamente medicinales.

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Como hasta ahora los médicos no tenían formación suficiente en el tema, el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) organizó un curso de cinco módulos que empezó en abril y se transformó en el primero en América Latina en la materia. Uno de ellos se basó en oncología y cuidados para paliar el dolor, otro sobre farmacología, otro sobre salud mental y enfermedades neurológicas y el próximo se realizará mañana y será sobre enfermedades inmunitarias.

La coordinadora del curso, Julia Galzerano, aseguró a El Observador que “los tiempos están siendo lentos” para lo que esperaban y que eso “dificulta instrumentar las cosas”, indicó. Todavía no saben si fueron seleccionadas empresas pero una vez que ocurra, entre que se planta, se cosecha y se producen los medicamentos “pasan como ocho meses aproximadamente”, dijo.

Los médicos –quienes son los únicos especialistas habilitados para recetar el cannabis medicinal- están expectantes a que se comience a producir en el territorio uruguayo para poder recetarlo y tener certeza de que sea de buena calidad.

Los efectos de la marihuana medicinal en las personas han demostrado funcionar de manera favorable en para tratar varias enfermedades, como por ejemplo, como antiinflamatorio y analgésico para dolores crónicos, como la artrosis.

Pero el poder del cannabis también actúa en los procesos oncológicos para paliar los efectos secundarios de los tratamientos como pueden ser las náuseas, vómitos y el cansancio.

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Por otro lado, la marihuana medicinal también puede reducir los impactos de patologías como alzheimer, baja presión ocular o de los consumidores problemáticos de cocaína, porque colabora en la disminución de la cantidad de consumo.

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Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.