Las propiedades anticancerígenas del cannabinoide no-psicoactivo cannabidiol (CBD) se han demostrado en diferentes células cancerosas. Se propusieron diferentes dianas moleculares para el CBD, incluyendo receptores cannabinoides y algunos canales iónicos.
Ahora investigadores de la Universidad de Colima, México, han demostrado que las células de la leucemia, pero no las células sanguíneas sanas, son altamente sensibles al tratamiento con CBD. El efecto del CBD no depende de los receptores cannabinoides ni de los canales de membrana plasmática. En su lugar el CBD se dirige directamente a las mitocondrias, las fuentes energéticas celulares, y altera su capacidad para manejar el calcio. El CBD causa sobrecarga mitocondrial de calcio y la muerte celular.
Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.