El Ministerio de Seguridad argentino habilitó el primer centro destinado a la elaboración de cannabis medicinal del país. Funcionará en la provincia de Jujuy y estará encargado de realizar estudios científicos, medicinales y terapéuticos.
Se trata del primer espacio dispuesto para el estudio e investigación del uso medicinal de la marihuana y sus derivados desde que se sancionara la ley 27.350 en el país sudamericano en 2017. En su primer artículo, la ley establece que su objetivo es “establecer un marco regulatorio para la investigación médica y científica del uso medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor, de la planta de cannabis y sus derivados”.
La ley invita a las provincias y a la ciudad de Buenos Aires a incorporarse al programa. Gerardo Morales, gobernador de Jujuy fue uno de los primeros en pedir que su provincia sea sede de un centro destinado a los objetivos establecidos por la ley. Tras una serie de evaluaciones realizados por el Ministerio de Seguridad, se concluyó que allí se establecería el primer centro argentino de elaboración de cannabis medicinal.
“A partir de un exhaustivo análisis técnico realizado por especialistas de la fuerza federal, se concluyó que el establecimiento (presentado por la gobernación de Jujuy) contaba con las normas de seguridad necesarias y que cumplía con las pautas legales impuestas a nivel nacional y provincial”, apuntó en un comunicado la cartera de seguridad.
Una empresa del hijo del gobernador será la encargada del proyecto
La empresa jujeña “Cannabis Avatãra”, creada el pasado octubre, se encargará del cultivo, producción, industrialización y comercialización de cannabis con finalidad científica, medicinal y terapéutica, tal como indica la ley. La empresa calcula que la producción de aceite de cannabis empezará entre la mitad y el final de 2019. El director de la empresa es Gastón Morales, hijo del gobernador de Jujuy. “Cannabis Avatara” trabaja en asociación con “Green Leaf Farms International”, una firma privada radicada en Estados Unidos que aportará fondos para el proyecto.
El proyecto piloto se asentará en tierras del Estado, en una superficie de 5 a 15 hectáreas y se prevé que las semillas importadas lleguen a fines de febrero para comenzar los procesos de germinación y cultivo. Se estima que el proyecto piloto esté finalizado para el mes de junio.
Organización impulsora de la ley del cannabis critica la iniciativa de Jujuy
La iniciativa legislativa fue impulsada por organizaciones civiles como Mamá Cultiva, integrada por madres cuyos hijos necesitan el aceite de cannabis para sobrellevar diversas enfermedades. Pero desde la organización se alzaron voces en contra del proyecto en Jujuy.
Valeria Salech, presidenta de Mamá Cultiva, criticó la creación del centro en la provincia de Jujuy durante una entrevista a Radio Sur de Argentina. Para ella el proyecto sería una suerte de excusa para exportar la producción. “Lo anunciaron con bombos y platillos como si fuera una buena noticia que el Ministerio de Seguridad autorizó un predio en Jujuy para un cultivo importado. No puedo encuadrarlo en una buena noticia porque se van a dar suelos argentinos para el cultivo de cannabis cuyos fines son la exportación de la producción, entonces ¿qué pasa con nosotras que hace años venimos pidiendo que se nos de autorización a las ciudadanas argentinas que tenemos un familiar con algún problema que la medicina alopática no puede resolver? Es una sordera estatal”, declaró.
El rechazo también provino del sector político. En este sentido, la diputada provincial, Alejandra Cejas, presentó una demanda junto al abogado Juan Giusti, en la que expresaron las dudas que tienen en cuanto a la transparencia de la creación de la empresa y de su funcionamiento en el país.
La asociación con una empresa privada generó polémica entre los defensores de una producción y distribución exclusivamente estatal. En esta línea, algunos señalan que al tratarse de un proyecto con capitales privados será un negocio y se corre entonces el riesgo de que la producción no llegue a la gente de bajos recursos. Esa es la opinión de María Laura Alasi, mamá de una niña de seis años que padece convulsiones y fue la primera argentina que consiguió la autorización para importar el aceite, que redujo sustancialmente los episodios de espasmos de su hija.
El consumo de medicamentos elaborados a base de cannabis está regulado en varios países latinoamericanos, entre ellos, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Perú, Puerto Rico, Uruguay y, ahora, Argentina. Y empresas basadas en Canadá y en estados de Estados Unidos, donde la planta ha sido legalizada, empiezan a invertir en el continente.
Según científicos argentinos, las propiedades paliativas del cannabis, observadas ya en alrededor de 50 patologías de distinto origen, son efectivas para atenuar o eliminar los efectos adversos de tratamientos oncológicos como la quimioterapia, ya que reduce las náuseas o la caquexia (pérdida de apetito). A la marihuana se le atribuyen otras virtudes curativas.
Muchos años luchando en la sombra para que el cannabis florezca al sol.
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